sábado, 23 de febrero de 2008

No country for old men


Vaya por delante que considero a los hermanos Cohen unos de los creadores americanos mas interesantes de los últimos tiempos. Bueno pues hace unas semanas pude ver su ultima película "No es país para viejos" donde adaptan la novela homónima de Cormak McCarty y como en sus ultimas películas he tenido sensaciones encontradas respecto a ella.

La historia base es sencilla un hombre se encuentra un maletín con dinero de unos narcotraficantes y es perseguido por un asesino implacable que lo quiere recuperar. Una trama sencilla digna de cualquier thriller al uso, pero basada en una novela de uno de los escritores mas interesantes americanos y en manos de unos directores con ganas de jugar con as reglas narrativas.

La pelicula se divide en dos partes bien diferenciadas: en la primera asistimos a un thriller muy bien montados con unas escenas de tensión/acción realizadas con precisión milimetrica capaces de ponernos el corazón en un puño si lograramos conseguir un poco de empatia por el prota. En mi caso no funcionó en absoluto, me pareció un personaje un poco desdibujado que hace cosas bastante absurdas.

La primera parte acaba con una elipsis brutal, un atrevimiento criminal de los Cohen que se saltan a la torera el manual de desarrollo de thrillers que debe andar por Hollywood (seguro...). De golpe y porrazo la película cambia de protagonista y de punto de vista para pasar a reflexiones de otro personaje que hasta ese momento considerábamos secundario. El desenlace es muy interesante pero peca de lo mismo que el anterior tramo una falta de conexión con los personajes por parte del espectador crítica.

Estoy convencido que la culpa de este problema es la excesiva fidelidad al texto de la novela, no me la he leído, pero McCormak basa su estilo en una síntesis y una sequedad de texto impresionante. Lo que funciona en una novela, que tiene un tempo narrativo diferente al cine convencional donde podemos reflexionar sobre las motivaciones de los personajes, puede no funcionar en una película porque en hora y media o dos horas necesitamos mas cables a la hora de entrar en la historia. Seguramente volver a ver la película me haría mejorar mi opinión sobre ella, me paso con Oh!Brother, pero la verdad es que no tengo demasiadas ganas de momento. De todos modos es una película muy interesante, merece la pena intentarla comprender.

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